El apio, además de ser un vegetal muy saludable, rico en vitaminas,minerales y fibra, tiene propiedades diuréticas y depurativas, convirtiéndose en el ingrediente ideal para cualquier dieta de adelgazamiento.
El apio se puede agregar a la sopa en invierno, las ensaladas en verano y también el jugo de la fruta durante todo el año. Él puede ser consumido entero, o sea, tanto las hojas como los tallos y hasta la raíz son comestibles.
1- Receta del Jugo de Apio con Jugo de Sandia para Adelgazar
Ingredientes
- 2 tallos de apio
- 1 vaso de jugo de sandía
Modo de preparación
Para preparar este remedio casero basta con cortar los extremos del tallo y agregarlo en la licuadora junto con el jugo de sandía. Tome varios sorbos a lo largo del día.
Quién desea adelgazar, además de utilizar este remedio casero se debe hacer una reeducación alimentaria, la disminución de la ingesta de dulces, grasas y el exceso de carbohidratos. Combine este remedio casero con una dieta balanceada y ejercicios físicos que le permitirá perder el exceso de peso mas fácilmente.
2- Receta para Adelgazar con Apio y Manzana.
Para bajar de peso con el jugo de apio se debe tomar el jugo antes del desayuno.
Ingredientes
- un tallo y apio (apio)
- una manzana (con o sin cáscara)
- jugo de 1/2 naranja o 1 kiwi
Modo de preparación
En ayunas antes del desayuno bata en la centrífuga el apio, la manzana, la naranja o el Kiwi y beba el jugo 20 minutos antes de la primera comida del día. Además de ayudar a adelgazar esta receta es muy nutritiva y saludable.
Valor Nutricional del Apio
Cada 100g de apio con sólo 20 calorías y:
- Carbohidratos – 2,3 g
- Proteína – 0,7 g
- Lípidos – 0,10 g
- Calcio – 70 mg
- fosforo – 33 mg
- Hierro – 0,60 mg
Otros beneficios del apio para la salud
El apio es rico en diversos nutrientes: vitaminas A, B1, B2, B6, C, calcio, potasio, magnesio, ácido fólico, hierro, aminoácidos. Además, tiene pocas calorías, nada de grasas y pocos carbohidratos.
Además, este vegetal ayuda a combatir el cáncer -especialmente de estómago y colon-, reduce el colesterol LDL, ayuda a la digestión, tiene propiedades antiinflamatorias, baja la presión arterial, trata el insomnio, previene y elimina piedras en la vesícula y los riñones, mejora la sexualidad, reduce la ansiedad, alivia los síntomas de la menopausia, las alergias y la fiebre.