La respuesta a esta pregunta no es única, ya que depende en gran medida de las circunstancias personales de cada persona, sin embargo hay algunos beneficios y ventajas que aporta el ducharse en esos dos momentos puntuales del día.
Hay que señalar que no se debe exceder en tomar muchas duchas diarias ya que bañarse demasiado elimina las barreras protectoras que hay en la piel y siendo más vulnerable a los ataques de microorganismos como las bacterias.
La ducha, además de eliminar las impurezas y la suciedad del cuerpo así como refrescar y relajar, también ofrece una serie de ventajas como las que le detallamos.
Ventajas que ofrece tomar la ducha por la mañana:
-Ayuda a despejar la mente y el cuerpo.
-Aumenta la circulación sanguínea.
-Favorece en caso de tener la piel grasa ya que ducharse por la mañana revitaliza y limpia los poros, así como terminar la ducha con agua fría cierra los poros.
-Alivia la tensión muscular. Una ducha de agua caliente por la mañana ayuda con la rigidez de los músculos del cuello y los hombros.
-En caso de transpirar mucho por la noche la ducha matutina es mejor.
Ventajas que ofrece una ducha por la noche:
-Tomar una ducha por la noche reduce la presión arterial y el estrés.
-Induce al sueño.
-Ayuda a mejorar la piel seca y el eczema.
-Tomar una ducha por la noche es recomendable sobre todo si estamos más expuestos a actividades o trabajos en las que sudemos o se está más en contacto con los gérmenes.
Por tanto, la elección de tomar una ducha por la mañana o por la noche depende de cada persona, pero también se puede tener en cuenta el tipo de piel que se tiene, si es grasa o seca, así como a los patrones de sueño que se tienen. La ducha afecta al cuerpo y a la mente, por lo que elija la opción que más le beneficie para sentirse bien.
