Técnicas budistas para limpiar tu hogar
Nosotros limpiamos nuestra casa todos los días, muchas personas utilizan esta labor como ejercicio y otras la encuentran tediosa, muchas veces por motivos de trabajo o alguna cosa que tengas pendiente hacer diaria, dejamos desorden; lo mejor que podemos hacer es arreglarlo al estilo del monje budista.
Cuando ya no hay espacio para acomodar las compras del supermercado, en ese lugar que se considera “sagrado“ deja de serlo y se vuelve estresante, esto nos hace sentir desconcentrados y sin ánimo de hacer nada.
Por eso, es importante que en nuestro hogar mantengamos el hábito del orden. En muchas culturas religiosas se habla de la importancia de la limpieza y la pulcritud. Como dicen, dónde hay desorden no puede reinar la serenidad y el ambiente en el que estamos es lo que reflejará.
¿Que pensarás sobre limpiar tu casa al estilo del monje budista?
La costumbre de los monjes budistas es, transformar las tareas del hogar ejercicios de crecimiento espiritual, ellos lo consideran algo divertido y muy fácil. En el libro “manual de limpieza de un monje budista” las actividades de un monje inician al ahora de limpiar el templo. Inician barriendo el interior del lugar, después el jardín, hasta tener todo el lugar pulcro.
Ellos lo hacen no porque esté sucio, sino porque de esta forma liberan el lugar de cualquier mala energía que puede estar presente. Relató un joven budista, que un discípulo de Buda encontró la iluminación, cuando barría.
Para aplicar este método, no se necesita ser religioso o espiritual, ni tampoco hacer un retiro en las montañas para aprender a liberarnos de las energías malignas. Sólo es necesario estar dispuestos a cambiar la forma de limpiar y así dar inicio a una buena higiene doméstica.
El budismo explica que nuestra mente se concentra en el ahora, y a esto se le considera una de las llaves para el éxito y la felicidad en la vida.
Es muy fácil limpiar no es nada del otro mundo
Orden afuera y adentro
Lo importante es mantener limpio todo el lugar y no dejarlo para “después”. Si lo que deseamos es una casa ordenada, no será necesario volver a las costumbres de las abuelas, es válido utilizar las herramientas que nos hagan esta labor mucho más rápida.
Armonía en todo momento
Actualmente el modernismo nos impulsa a dejar de un lado las tareas anuales, lo importante aquí es, estar conscientes de nuestro estado mental y cómo puede ser desbalanceado por un lugar no armonizado.
Revitaliza tus pensamientos
Los monjes budistas comentan que, cuando se limpia alguna área de la casa es más que un oficio de diario. Esto ayuda a cultivar nuestra mente y logra revitalizarnos. Por otro lado , es importante saber que, tanto los lugares como los objetos son igual de importantes, nuestro entorno está conectado con nuestra mente y es el reflejo.
Así que, el orden o el desorden te estarán dando una pista de cómo trabaja tu mente y en ese sentido se puede explicar cuando ocurren eventos afortunados o desafortunados en tu vida.
¿Cómo te puedes motivar a limpiar de acuerdo al monje budista?
Ordenar tus prioridades
Si eres de las personas que siempre está muy ocupada en su trabajo, es muy importante que te pongas a pensar si realmente te estás ocupando de lo que realmente es importante en tu vida, observa tu entorno y verifica que todo lo que estás haciendo te hace completamente feliz y te hace sentir en paz. Es una buena opción que contrates a alguna persona para que haga los quehaceres de tu hogar. Todo es válido cuando se trata de vivir el presente con armonía.
Evalúa tu tiempo
Una forma de motivarnos cuando realizamos limpieza en nuestro hogar, es pensar en dedicarle poco tiempo. Inicia poco a poco realizando el hábito de pequeñas tareas diarias, una puede ser el tender la cama a levantarte, lavar los platos luego de cada comida. Con esto te aseguro que mantendrás todo en su lugar y llegará el momento en el que cuando veas un objeto fuera de su lugar te hará sentir incómodo.
7 consejos importantes de un monje budista para asear el hogar
El monje tibetano Tulku Thondup, relata que “Si realmente supiéramos la virtud,el propósito de limpiar y el mérito, seríamos capaces de apreciar las labores domésticas como un privilegio en lugar de una carga. Lo que parecía un trabajo sucio, lo verás como una oportunidad y así practicar la meditación de una forma única.
Puede convertirse, en una fuente de muchos beneficios, dónde crecerás en fuerza mental, espiritual y emocional. A continuación te diremos las recomendaciones más importantes:
1- Si no acostumbras cuidar los objetos tampoco cuidas a las personas que están cerca de ti: es importante tomar en cuenta que cada uno de los objetos que tenemos en nuestro hogar, porque tuvo un proceso de esfuerzo y dedicación de alguien más, por este motivo, debemos cuidarlos y al limpiarlos, estamos mostrando gratitud por el trabajo que alguien más realizó.
2- Se agradecido con todo aquello que te fue de utilidad: puedes reciclar lo que ya no necesitas, tal vez darle mejor uso, incluso regalarlo a quien sí vaya usarlo o le sirva y no lo deje a un lado, sólo acumulando polvo.
3- Thondup comenta que “El corazón se sentirá en paz y la mente despejada”.antes de que vayas a dormir, ordena lo que vayas a utilizar el día siguiente.
4- Te recomendamos abrir las ventanas, para que el aire circule por toda tu casa antes de iniciar con la limpieza: cuando llenas tus pulmones de oxígeno limpio, te darán más ganas de limpiar y te conectarás con la naturaleza, la humanidad y la vida.
5- Evitar dejar los trastes sucios durante la noche: es de suma importancia lavar los platos cada vez que terminas de comer, si tienes basura orgánica, la podrás utilizar como composta y la que inorgánica directo a la basura.
6- Cuando estés limpiando concéntrate en el aquí y ahora: cuando tu mente se concentra en otras cosas, las actividades que estás realizando te parecerán interminables. Mantén tu atención en la tarea que estás realizando. Y por último.
7- Dividir las tareas con los demás miembros de la familia: esto, tendrá como consecuencia, que cada uno aprenderá a valorar el trabajo del otro y así entenderás que todos dependemos de los demás.