Muchas personas especializadas en nutrición nos van a decir que nosotros somos lo que comemos y hasta cierto punto nuestro cuerpo es el resultado de los alimentos que nos hemos venido llevando a la boca desde hace muchos años.
Puede que la factura de nuestra forma de comer no sea emitida si no ya cuando lleguemos a la tercera edad, pero la realidad es que tarde o temprano nuestro cuerpo va a empezar a manifestar para bien o para mal las consecuencias de lo que hemos venido comiéndose incluso los alimentos que utilizamos para complementar nuestra cocina o platos cotidianos.
El día de hoy nosotros queremos platicarte acerca de si es mejor consumir grasa de cerdo o recurrir a los aceites que las industrias de producción de comida nos han inculcado como más saludables y esenciales para nuestra cocina diaria.
Presta mucha atención porque lo que nosotros estamos a punto de contarte puede desmentir uno de los más grandes mitos culinarios de todos los tiempos y es que la grasa de cerdo no es para nada dañina.
Grasa de cerdo versus todos los otros aceites
Interesante estudio del doctor Michael Mosley, anunciado en la BBC , confirma que cuando se fríen los alimentos con manteca de cerdo, en realidad “es mucho mejor”, y la razón es que aquellos que son preparados con aceites de origen vegetal ,como el aceite de oliva, al instante de freírse o calentarse, pueden sufrir o generar cambios en su composición y producir sustancias dañinas para el organismo.
Si le preguntas a la persona cotidiana que se debe preparar sus tres comidas al día te van a decir que la grasa de cerdo es una de las peores herramientas que puedes utilizar para emplear la ejecución de tus platos de comida que es mejor recurrir a aceites de girasol aguacate u otros alimentos.
La realidad es que la mayoría de estos complementos o aceites al ser expuestos a un alto nivel de calor segregan gases los cuales ocasionan a nuestro cuerpo enfermedades tales como cardiopatías, cáncer e incluso problemas respiratorios.
Es decir, puede que a temperatura ambiente sean lo mismo o estos aceites no se consideran dañinos a nivel nutricional pero cuando son expuestos al calor cosa que es sumamente necesaria para poder cocinar los alimentos se vuelven tóxicos y dañinos en especial para que el que está cocinando la comida.
Ahora bien, si analizamos los niveles y valores nutricionales que nos aportan cada uno de estos aceites podemos observar que ellos lo que hacen es aumentar el nivel de colesterol malo, convertir nuestro organismo en un ambiente poco alcalino o en otras palabras ha sido y aumentar el riesgo de padecer de enfermedades tales como la gastritis, úlceras, entre otras.
Mientras que si analizamos los aportes nutricionales que nos trae la grasa de cerdo podemos encontrar que tiene alto contenido en hierro vitamina A, B y C, lo más importante de todo es que no tiene sabor u olor alguno así que queda perfecto para cualquier preparación.
Lo más importante de esto es que la grasa de cerdo no debe ser procesada o acompañada de conservantes para que esta se preserve con el paso del tiempo, por lo que naturalmente algo que no tiene componentes químicos o debe ser pasado por numerosos procesos para destilarse es más nutritivo que los otros aceites.
Sabemos que puede resultar sumamente difícil de creer por lo que te invitamos a que lo investigues con tus propios medios y lo más importante es que le des una oportunidad a cocinar con grasa de cerdo cualquiera de tus platos cotidianos para que observa es que no solamente van a quedar más frescos, sino que también van a tener un sabor menos artificial.
Si conoces a alguien que le encanta utilizar este tipo de aceites para cocinar te pedimos que por favor le hagas llegar esta información lo más pronto posible ya que puedes estar alargando su vida al pedirle que comience a utilizar la grasa de cerdo en vez de estos otros productos.