Muchas personas piensan que el hecho de estar solo implica algo malo. O bien eres alguien antisocial, o bien tienes algún problema; en todo caso, parece que estar solo “no queda bien”.
En realidad, ser solitario no es necesariamente algo malo ya que podemos obtener varios beneficios que provienen de la soledad cuando aprendemos a convivir con ella. Esto no quiere decir que adoptemos un estilo de vida en el que no incluyamos a nadie, sino que podemos encontrar en la soledad una forma de reencontrarnos con nosotros mismos.
¿Te encuentras sólo en este momento? Aprovecha tu etapa de soledad para enriquecerte como persona. Te ayudamos a que lo veas de esta manera:
1) Tiempo de reflexión.
La soledad te brinda más tiempo para reflexionar. La vida pasa a un ritmo desenfrenado y no nos deja tiempo para pensar en cómo estamos viviendo. Estando solo, tendrás la oportunidad de hacer la autorreflexión que todos necesitamos.
2) Tomar contacto con nuestras emociones.
Cuando estamos rodeados por otras personas, es muy común preocuparnos por sus necesidades y dejar de lado las nuestras. Al encontrarnos solos, tomaremos una mejor perspectiva de nuestras emociones analizando cuáles son las cosas que nos hacen felices y cuáles no.
3) Recuperar energía.
¿Tienes idea la cantidad de energía que implica tratar de hacer feliz a alguien? Cuando intentamos que otros se sientan bien, estamos invirtiendo un esfuerzo que al final del día resulta agotador. ¡Inviértelo en ti mismo!
4) Producir más.
Esto podemos aplicarlo a cualquier actividad o trabajo. Es agradable estar rodeado de personas, pero lo cierto es que cuando estamos solos y no tenemos distracciones, terminamos antes nuestras tareas y nos volvemos productivos.
5) Seguir nuestros propios deseos.
A todos nos ha pasado alguna vez de aceptar hacer algo por compromiso en presencia de otros. Estando solos, podemos planificar nuestras propias actividades a nuestro gusto.
6) Apreciar mejor la compañía de otros.
Pasar algo de tiempo solos, nos hará apreciar aún más la compañía de otras personas porque la soledad te ayuda a valorar mejor lo que otros te brindan.
7) Sentirse independiente.
La soledad es una buena manera de reforzar nuestra autoestima. Resolviendo conflictos solos, ganamos confianza en nosotros mismos logrando mayor independencia que luego nos beneficiará en la interacción con otras personas.
8) Liberar presiones.
A pesar de ser conscientes de que no debemos hacerlo, todos esperamos de manera directa o indirecta la aprobación de nuestro entorno. No está mal pedir un consejo o una opinión, pero la soledad te hace ver que eres absolutamente capaz de tomar decisiones por ti mismo. ¡Confía en tu intuición!
9) Potencia nuestra creatividad.
Una buena oportunidad para aprender cosas nuevas, o desarrollar nuestros talentos ocultos. Desde reparar algo con nuestras propias manos (porque no hay nadie más que lo haga) o decidirnos a emprender un nuevo proyecto, la soledad es una buena fuente de inspiración.
10) Apreciar la soledad.
Por último, la ventaja de estar solo o de vivir una etapa de soledad, nos hace ser conscientes de que precisamente podemos con ello. Los seres humanos somos personas sociables y estamos destinados a vivir en grupos, pero el desafío de la soledad es una prueba que nos hace conscientes de la habilidad que todos tenemos para superarnos a nosotros mismos.
¿Qué opinas de la elección de estar solo? ¡Comenta y comparte tu experiencia!
