Al realizar el examen llamado espirometría, que es un análisis de la función pulmonar, pueden encontrar limitaciones pulmonares y algunas modificaciones en el intercambio de gases que lleva el pulmón.
Esta enfermedad produce debilidad al realizar cualquier tipo de esfuerzo, dificultad al respirar y es posible que la sangre no reciba suficiente oxigeno, haciendo que la persona se haga totalmente dependiente.
Sus causas son desconocidas, pero existen ciertos riesgos que ayudan a que esta enfermedad se produzca, como ser fumador y llevar años haciéndolo, la ingestión de algunos medicamentos comunes, como antidepresivos, por causas ambientales, tanto en el medio urbano como el rural, estar expuesto a sustancias como el plomo, acero, latón, serrín, o madera de pino, contribuyendo al desarrollo de la enfermedad, infecciones virales o bacterianas, enfermedad autoinmune, herencia.
Entre sus síntomas están:
-El cansancio por ejercicios básicos que no requieren gran trabajo, como caminar.
-Tos seca o con flemas.
-Sofoco inhabitual.
-Dolores torácicos.
-Posibilidad de pérdida de apetito y de peso.
-Cianosis.
-Deformación de los dedos.
-Dolores musculares y en articulaciones.
Remedios naturales:
Limón: beber su zumo en ayunas, limpia el organismo.
Arándanos con piña: Beber el zumo de estas frutas, es un poderoso antioxidante. Mejora la circulación de la sangre.
Zanahorias: Realizar un zumo, licuando zanahoria y un poco de remolacha. Beber a sorbos sin colar. Es antioxidante, ricas en vitamina A, mejora la circulación y contiene betacaroteno, muy beneficioso para la fibrosis.
Ciruelas: Comerlas con el estómago vacío, en las mañanas, en la tarde y cuando hayan pasado varias horas después de la última comida. Son muy beneficiosas para esta enfermedad, contiene nutrientes y vitaminas, disminuyen el colesterol y la circulación es más óptima.
Aloe: Beber su jugo mezclado con agua y zumo de zanahoria. Depura el cuerpo de toxinas y tiene poder regenerativo.
Recomendaciones:
Evitar los azúcares, los dulces sustituirlos por miel.
Evitar carnes rojas, embutidos, alcohol, leche de vaca y sus derivados.
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