Los estrógenos no solo intervienen en la fertilidad de las mujeres sino que también ocasionan efectos en otros órganos del cuerpo.
Normalmente el hígado elimina inmediatamente el estrógeno del cuerpo, pero si el hígado no funciona correctamente o hay un exceso de estrógeno, se pueden llegar a tener niveles muy altos de estrógeno.
Si la capacidad del cuerpo para eliminar las hormonas usadas se deteriora, estas recirculan causando problemas tales como el síndrome premenstrual.
Al mismo tiempo se debe eliminar cualquier exceso de estrógenos ya que pueden causar otros problemas más graves como son la promoción de cánceres como cáncer de mama o de colon.
Se deben minimizar los efectos perjudiciales limitando la exposición, desintoxicando y equilibrando con los niveles de progesterona.
A través de la dieta y con suplementos específicos el exceso de estrógenos se puede remover de forma segura del cuerpo.
El primer paso en la descomposición de los estrógenos es la conversión de estradiol a estrona. La estrona se metaboliza a través de la fase I de desintoxicación del hígado (hidroxilación) en 2-hidroxiestrona. Las verduras crucíferas, semillas de lino, soja y sustancias de suministro de romero como indol-3-carbinol son necesarios para que se produzca este paso.
En la fase II de desintoxicación (metilación) se convierte la 2-hydroxyestrone a 2-metoxiestrona. Este paso requiere para su proceso de vitaminas B6, B12 y ácido fólico activo.
Los beneficios que se obtienen al mejorar el metabolismo del estrógeno incluyen la reducción del riesgo de cánceres relacionados con las hormonas, períodos más ligeros, menos cólicos, menos sensibilidad en los senos, reducciones de los fibromas, la mejora de la fertilidad, y la mejora de la piel.
La desintoxicación de estrógenos como promedio, se debe realizar una vez al año, aunque depende de cada persona y de los síntomas en particular que tenga.
En el caso de los hombres, también pueden tener un exceso de estrógenos y también es importante que realicen una desintoxicación ya que un exceso de estrógenos podría conllevar tener mayor riesgo de padecer cáncer de próstata.
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