Seguro que como todos, en su despensa tiene algún tarro de especias o algún bote de conservas que lleva mucho tiempo almacenando y que ya ha caducado o no está en buen estado, y seguro que después de conocer los peligros que puede acarrear el consumo de algunos alimentos que no están en sus mejores condiciones, mirará con atención todos los alimentos y productos que vaya a utilizar y a comer así como las fechas de caducidad.
Le detallamos algunos de los alimentos a los que hay que prestar especial atención ya que podrían contener algún tóxico que podría ser perjudicial.
-Patatas.
Las patatas son uno de los alimentos más importantes de nuestra dieta, pero este alimento que parece inofensivo puede ser tóxico para el ser humano.
Las patatas pueden albergar una sustancia verde justo debajo de la piel que hace que comerlas crudas o con piel pueda ser un peligro para la salud.
Esta sustancia verde es la solamina, que puede afectar a nuestro organismo causando desajustes gastrointestinales como dolor estomacal, vómitos, diarrea o reacciones alérgicas entre otros.
Cuanto más vieja sea la patata las concentraciones de solamina aumentan, por lo que no debe comer patatas que lleven mucho tiempo en su despensa ni aquellas patatas que estén verdes en sus extremos. Se aconseja consumir las patatas cuanto antes y eliminar perfectamente la piel.
-Pan.
El pan con moho puede ser realmente peligroso. Quizá tenga un paquete de pan que lleve algún tiempo en su despensa, esté enmohecido y retire solo la rebanada de pan que tiene moho y consuma el resto, pero esto puede provocar además de malestar estomacal, otros problemas más graves para la salud.
-Huevos.
Si los huevos no son frescos y han sobrepasado su fecha de caducidad, pueden haberse podrido y provocar desde un malestar estomacal a salmonela.
Preste atención a los huevos que consume.
-Productos enlatados.
Si la fecha de caducidad de los productos enlatados ha caducado, no se arriesgue a comerlos ya que podrían causar botulismo, una intoxicación causada por la toxina botulínica.
Deseche cualquier lata caducada, o que esté doblada o hinchada.
-Pepino.
Consumir un pepino que no esté fresco y esté marchito puede causar daños en el revestimiento intestinal debido a que algunas veces los pepinos marchitos segregan un líquido que es un químico de descomposición que puede afectar a la salud.
-Especias.
Las especias secas se deben desechar si llevan mucho tiempo en la despensa ya que si el polvo llega a recubrir las especias pueden estar infectadas por insectos.
-Productos secos.
Si algún alimento seco como la granola huele mal lo mejor es tirarlo ya que podrían estar en estado de descomposición y pueden causar dolor de estómago si se consumen en mal estado.
Las despensas de los hogares son uno de los lugares donde podemos acumular alimentos que ya han caducado y no están en buenas condiciones, por lo que revise su despensa y retire todo aquello que podría ser perjudicial para su salud como medida de prevención.