El selenio es un oligoelemento esencial, lo que significa que el cuerpo tiene que obtener este mineral por medio de los alimentos que se consumen.
Este mineral actúa y contribuye al funcionamiento correcto del organismo ya que contiene propiedades antioxidantes que pueden prevenir el cáncer, reducir el envejecimiento y combatir los radicales libres, ayuda en la formación de anticuerpos y ayuda a prevenir problemas cardiovasculares como el infarto de miocardio.
Al mismo tiempo el selenio puede ayudar a mejorar la elasticidad de los tejidos del cuerpo, a eliminar el ácido úrico, reduce la aparición de acné y previene la caspa, previene enfermedades de la piel y los problemas de la vista como las cataratas, y favorece el crecimiento y desarrollo de los niños.
Como hemos comentado el cuerpo obtiene este mineral a través de los alimentos que se consumen, aunque también existen complementos vitamínicos.
A continuación le detallamos una lista de alimentos que son las mejores fuentes de este mineral:
Marisco y pescado.
Fuentes de este nutriente son el atún, la caballa, las ostras, los calamares, langosta, camarones y almejas.
Carne.
La carne aporta proteínas y algunas de ellas como la carne de cerdo, de res, carne de cordero, pollo y pavo también aportan selenio.
Nueces.
Las nueces contienen proteínas y grasas saludables, y muchas de ellas también son fuentes de selenio como las nueces de Brasil, de macadamia o los anacardos.
Quesos.
Algunos quesos como el queso Cheddar y el queso cottage son fuentes del mineral selenio. Granos enteros.
El arroz salvaje, arroz integral, avena y quínoa aportan selenio y fibra dietética, ambos beneficiosos para la salud del corazón.
Otra opción es la pasta, fideos y pan de grano entero o harina de trigo integral.
Huevos.
Los huevos albergan en la yema la mayor parte del selenio que contienen.
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